Suplementos Alimenticios

Patologías Cerebrales – DMSO

Utilidad en patologías cerebrales

Protector neuronal, cerebral y encefálico

En 1975 un equipo de la Universidad de Ottawa (Canadá) dirigido por el Dr. J. C. de la Torre publicó en Annals of the New York Academy of Sciences un trabajo en el que se constató, trabajando con distintos animales, que el DMSO es útil en distintos tipos de heridas traumáticas que afectan al sistema nervioso central: lesiones por impactos craneales, trombosis de la arteria cerebral, anoxia y lesiones en la médula espinal. Más tarde realizaría una serie de complejos experimentos con gatos para demostrar que una solución al 40% de DMSO, sola o combinada con prostaciclina (prostaglandina PGI2), ejerce una significativa neuroprotección en caso de isquemia cerebral. El trabajo se encuentra ampliamente explicado y documentado en su artículo publicado en 1991 en Canadian Journal of Physiology and Pharmacology.

Tres años después -en 1978- un equipo dirigido por el Dr. R. K. Laha publicó en Journal of Neurosurgery los resultados de unas investigaciones con perros sobre el efecto protector del DMSO en caso de embolia arterial (carótidas) constatando que en los animales tratados con DMSO -al contrario de lo que ocurrió con los del grupo de de control- no se produjo infarto cerebral alguno.

Los doctores P. E. Camp, H. E. James y R. Werner demostraron por su parte mediante complejos experimentos con conejos albinos que el DMSO ayuda a eliminar el edema cerebral acaecido como consecuencia de un golpe traumático disminuyendo la presión intracraneal, la presión sanguínea local y la proporción de agua y sus electrolitos. Los resultados se publicaron en 1981 en Neurosurgery

Ya en 1991 los doctores M. Karaca, U. Y. Bilgin y M. Akar de la Universidad de Dicle (Turquía)- y el Dr. J. C. de la Torre -de la Universidad de Ottawa (Canadá)- presentaron un interesante estudio conjunto en European Journal of Clinical Pharmacology con 10 pacientes que habían sufrido un severo trauma craneal y presentaban una elevada presión intracraneal (ICP). Tratados cada 6 horas con inyecciones intravenosas de DMSO durante varios días se redujo la ICP y siete de ellos recuperaron los parámetros normales a los 6 días de tratamiento probando así que el DMSO intravenoso puede reducir rápidamente la presión intracraneal y facilitar la recuperación neurológica.

Y en otro ensayo, esta vez con ratones, el Dr. S. Shimizu y sus colaboradores del Departamento de Neurología de la Universidad de Pittsburgh observaron esos mismos resultados protectores en caso de isquemia; el experimento se describe en un artículo publicado en 1997 en Neuroscience Letters.

Y por si fuera poco los doctores C. Lu y M. P. Mattson National Institute on Aging de Baltimore (EEUU) publicaron en 2001 en Experimental Neurology un estudio según el cual el DMSO inhibe las respuestas al glutamato de las neuronas del hipocampo impidiendo su muerte neuronal; concluyendo que su uso puede ser eficaz en las patologías neurodegenerativas de origen tóxico.

Uso en las enfermedades mentales.

Los doctores E. Ramírez y S. Luza de la Universidad Peruana Cayetano Heredia de Lima (Perú)- publicaron en 1967 en Annals of the New York Academy of Sciences un artículo con el sugestivo título DMSO en el tratamiento de pacientes mentales en el que cuentan sus resultados tras tratar a 42 pacientes esquizofrénicos, maníaco-depresivos o neuróticos obsesivo-compulsivos a los que se dividió en dos grupos tratando a uno solo con DMSO y no recibiendo el otro más que la medicación habitual. Cinco mililitros de DMSO diluido al 50% que se les inyectó intramuscularmente de 2 a 5 veces al día según la gravedad de los síntomas. Los resultados variaron obviamente en función de la cronicidad de la neurosis siendo los casos agudos los de mejor resolución; de hecho la mayoría de éstos se recuperaron totalmente al cabo de 15 días de tratamiento; los más crónicos simplemente mejoraron pero no pudieron dejar el hospital, especialmente en el caso de los esquizofrénicos.

El Dr. M. J. Aspillaga y su equipo del Hospital de Niños Calvo Mackenna de Santiago de Chile publicaría en 1975 en Annals of the New York Academy of Sciences un trabajo con el sugestivo título de Terapia con DMSO para niños mongoloides con retraso mental severo. Y según se explica en él se administraron a 55 niños con Síndrome de Down (trisomía del cromosoma 21) inyecciones de 5 cc de DMSO al 5% junto con 5 miligramos de GABA (ácido gamma aminobutírico) y otros aminoácidos en días alternos y durante 3 meses. Divididos en dos grupos -mayores y menores de 3 años y medio- unos recibieron el tratamiento y otros sirvieron de control y no fueron tratados. Pues bien, los tratados mostraron al finalizar claras mejorías motoras y adaptativas así como leves mejoras en el uso del lenguaje que fueron muy notables entre los del grupo de más edad. En este grupo el coeficiente de inteligencia (IQ) pasó a una media de 40 en comparación con los 33 del grupo control. El personal sanitario del hospital manifestó de forma unánime la clara mejoría de los niños tratados con el DMSO respecto a sus parámetros previos al tratamiento. Experiencia similar a la realizada por las doctoras A. Guiller y M. E. M. de Bernadou del Hospital Pirovano de Buenos Aires (Argentina)- que se publicó el mismo año -1975- en Annals of the New York Academy of Sciences solo que esa vez con niños no-mongoloides. Con los mismos protocolos que en la experiencia chilena se trató a 13 niños sirviendo otros tantos de grupo de control y los resultados fueron similares: claras mejorías en los niños tratados.

Eficaz en alzheimer.

Los doctores Claudia Caputo y Andre I. Salama del ICI Pharmaceuticals Group (EEUU)- publicaron en 1989 en Microbiology of Ageing un artículo que analiza los conocimientos que hasta entonces se tenían sobre el desarrollo de las placas de amiloides en relación con el alzheimer concluyendo que dado que el DMSO se ha mostrado eficaz en la disolución de los amiloides, tanto in vitro como en ratones, debería investigarse más a fondo su utilidad en alzheimer. Y siguiendo esa misma línea de deducción el Dr. S. A. Goppa -de la Medical University de Kisheinev de Moldavia- presentó un trabajo de investigación clínica en la Fourth International Conference on Alzheimer’s Disease and related Disorders celebrada en Minneapolis (EEUU) cinco años después -en agosto de 1994- en el que se describen los resultados de administrar durante nueve meses DMSO a 18 pacientes de alzheimer observándose mejorías a partir del tercer mes que fueron aumentando hasta el final del tratamiento. Y en él no se habla solo de recuperaciones a nivel cognitivo: la mejoría se cotejó con marcadores sanguíneos de neuroproteínas e inmunoenzimas específicas del alzheimer. Lo insólito es que han pasado 20 años desde aquel ensayo clínico y no se ha vuelto a publicar nada sobre el DMSO en alzheimer ¿Será porque no es una sustancia patentable?

Útil en problemas visuales.

El Dr. R. V. Hill -de la University of Oregon Medical School de Portland (EEUU)- publicó en 1975 en Annals of the New York Academy of Sciences un trabajo sobre el uso del DMSO en 50 pacientes con retinitis pigmentosa y degeneración macular (DMAE) a los que se trató varias semanas mediante lavados de ojos -dos veces al día- con una solución al 50% de DMSO. Pues bien, en 36 mejoró la visión. Cabe destacar que el Dr. Hill inició sus pruebas al comprobar que muchos de sus pacientes que utilizaban DMSO por problemas de artritis o lesiones musculares le informaban de mejoras visuales. De hecho aunque no hemos encontrado trabajos en publicaciones científicas sobre el DMSO en problemas oculares son numerosos los testimonios personales que hablan de mejoras de todo tipo; desde cataratas y glaucoma hasta presbicia.

¿Cura el tinnitus?

El Dr. A. Zúñiga Caro del Hospital de Niños de Santiago de Chile -publicó en 1975 en Annals of the New York Academy of Sciences un interesantísimo trabajo sobre el DMSO en caso de acúfenos o tinnitus. Según explica en él trató a 15 pacientes de tinnitus instilando en el canal auditivo con un aerosol una dilución de DMSO y algunos fármacos antiinflamatorios y vasodilatadores una vez cada cuatro días durante un mes mejorando todos; de hecho el tinnitus desapareció por completo en 9. Es interesante destacar que algunos pacientes mejoraron también de sus problemas de cefaleas e insomnio. Con posterioridad varios médicos han utilizado técnicas similares de aplicación de DMSO pero combinándolo con aloe vera o capsicum obteniendo resultados rápidos y positivos.

Cabe destacar que la medicina convencional carece hoy de soluciones para estos pacientes con los que utiliza de forma tan ineficaz como peligrosa antibióticos y antidepresivos e, incluso, intervenciones quirúrgicas que no solo no suelen resolver el problema sino que crean nuevas complicaciones pudiendo incluso provocar sordera parcial o total.

Eficaz en la esclerosis múltiple

En 1984 el Dr. Zingerman publicó en Zhurnal Neuropatologii i Psikhiatrii Im S.S. Korsakova (Rusia) un trabajo según el cual trató con DMSO a 34 pacientes con esclerosis múltiple y todos mostraron una rápida remisión de la enfermedad; algo que el investigador ruso atribuye a la disminución del edema, a la modulación del ataque autoinmune y a su efecto remielinizador.

Solución a la bonquiolitis infantil severa

Un grupo de médicos chilenos del Hospital de Niños de Santiago de Chile encabezado por el ya citado A. Zúñiga Caro realizó una investigación clínica con 60 bebés hospitalizados por bronquiolitis severa a los que dividió en dos grupos dando a uno el tratamiento convencional -con antibióticos y carpa de oxígeno y vapor- y al otro de la misma forma pero además DMSO usando un spray. Pues bien, el 80% de éstos se recuperó a los 30 minutos de iniciado el tratamiento pudiéndoseles retirar la carpa de oxígeno. Los investigadores lo dieron a conocer en 1975 en Annals of the New York Academy of Sciences asegurando que es eficaz ante cualquier problema obstructivo pulmonar. De forma sencilla, barata y carente de efectos secundarios.

Útil en el síndrome del dolor regional complejo

Terminamos indicando que en el denominado Síndrome del Dolor Regional Complejo -también llamado Distrofia simpática refleja-, enfermedad crónica y progresiva caracterizada por dolor intenso, edema y cambios en la piel sin causa objetiva, es igualmente útil. Un equipo del Centro de Recuperación y Rehabilitación de Levante (Valencia, España) encabezado por el Dr. M. Gaspar trató a 29 pacientes con este problema mediante una solución tópica al 50% de DMSO logrando una disminución significativa tanto del dolor como de la incapacidad motora de las extremidades afectadas; el trabajo se publicó en 2012 en Farmacia Hospitalaria.

Tags:

Comparte:

0
    0
    Tu carrito
    ×

    ¡Hola!

    Da clic en nuestro representante aquí abajo para atenderte por Whatsapp.

    × ¿Cómo podemos ayudarte?